Gambrinus es el nombre de un personaje mitológico de los
Países Bajos que probablemente surge en
el folklore durante la Edad Media.
Siempre jovial y orondo, bebe cerveza y algunas leyendas lo hacen el inventor de la misma. Y así como Prometeo, el que trajo el fuego a
los hombres, está prácticamente olvidado, clubs Gambrinus hay en todo el mundo,
lo que muestra la distinta importancia que
la humanidad concede a uno y otro
héroe civilizador. Lo entiendo.
En Barcelona, Gambrinus ha dado nombre a varios locales en
una historia que empieza hace más de 140 años en el barrio chino. ¿y que
títulos reunía el barrio chino para que en él se aposentara el gordezuelo
diosecillo?
Quizá que el barrio chino y las zonas aledañas, siempre han tenido una buena
relación con la cerveza. Y me refiero aquí también a la instalación de fábricas de cerveza. Las dos fábricas de cerveza que existían en
Barcelona en 1842 se encontraban ubicadas, una en la calle Escudillers y la otra en la Rambla de Santa Mónica.
En 1849, continua habiendo en Barcelona dos fábricas de
cerveza, asimismo en el barrio chino, en
Portal de Santa Madrona y Conde del Asalto.
En 1851 llega a Barcelona Luis Moritz Trautmann, maestro cervecero
de Alsacia que encuentra a un socio capitalista, Ernest Ganivet, con el que en 1854
abre una fábrica de cerveza en la calle Arco de Cires. A los dos años,
la necesidad de ampliar la producción los lleva a trasladar la fábrica a Portal
de Santa Madrona y tres años más tarde, en 1859, compran la fábrica de cerveza
vecina, que ya conocíamos de 1849. El éxito de la
empresa fue notable y obligó a construir una nueva fábrica en Ronda San Antonio
esquina calle Casanovas. Era en 1864 y la fábrica se mantuvo en funcionamiento
hasta los años sesenta del siglo pasado.
Fábrica Moritz. Años treinta. Autor desconocido. Fondo FECSA (ANC).
En 1857, las siete fábricas de cerveza que operan en
Barcelona están en lo que hoy llamamos Raval.
Los orígenes y la implantación de la industria cervecera en España; siglo XVI-1913. Tesis doctoral de Xavier García Barber
Cerveza, barrio
chino... en 1871, August Kuentzmann Damm, cervecero
alsaciano, tras la guerra
franco-prusiana y la anexión por Prusia de la provincia de donde era natural, decide cambiar de aires y trasladarse a
Barcelona.
Kuentzmann encuentra un
socio capitalista, Camps, con el que abre una fábrica de cerveza en Sant Marti
de Provençals y una cervecería llamada Gambrinus que se inaugura en 1872, donde
se vendía la cerveza que producía la fábrica de Sant Marti de Provençals.
Ese primer Gambrinus se
instaló en el Portal de Santa Madrona. A los pocos años de existencia pasaría a
la propiedad de Valentin Pons. Buen lugar el Portal de Santa Madrona para
instalar una cervecería. Por el Portal
de Santa Madrona pasaba buena parte de los marineros extranjeros que arribaban a Barcelona camino
de los locales de sexo mercenario del barrio chino; amantes, muchos de esos
marineros, de la bebida que se
suministraba en el lugar.
Conocemos el exterior
del local por una foto de autor desconocido de los años
veinte/treinta del siglo XX.
Gambrinus del Portal de Santa Madrona
Valentin Pons abre un
nuevo establecimiento con el nombre de Gambrinus en 1881, en la Rambla de Santa
Mónica. En lo que entonces era el número 29. Cervecería, restaurante de
productos típicos alsacianos y con habitaciones para viajeros, es decir, hotel.
Siendo Alsacia una
región a caballo entre Francia y Alemania, pronto se convirtieron ambos
establecimientos en lugar de encuentro
de los extranjeros de una y otra nacionalidad que se encontraban en Barcelona.
Incluyendo a los suizos cuya Sociedad Helvetia, con un tal Hans Gamper de
socio, ubicó su sede social entre 1900 y
1904 en el Gambrinus de la Rambla Santa
Mónica. Los turistas alemanes de paso por nuestra ciudad recalan en el Gambrinus como señala la nota de La Vanguardia que incluyo:
Con frecuencia
encontraremos noticias de uno u otro Gambrinus en relación
con actividades de la colonia francesa (venta de entradas para financiar
al comité de escuelas francesas gratuitas, conferencias de personajes
variopintos franceses, etc)
La Publicidad. 8 de febrero de 1880
La Vanguardia. 1 de julio de 1903.
El 12 de mayo de 1885,
La Vanguardia nos informa de que tras una importante reforma del local de la
Rambla Santa Mónica, éste se ha convertido en fonda.
En fecha incierta, ambos
locales pasan a propiedad de Jaime Soler,
pero no más tarde de 1887 puesto que aparece Soler en el Anuario Riera de aquel año
como propietario de los locales.
Jaime Soler que en 1881
administraba un balneario en Argentona y comercializaba el agua de los
manantiales del mismo en su local de la calle Conde del Asalto 26, compra otro balneario en Caldas de Malavella y comercializa su agua carbónica como Vichy Gambrinus que vende en sus locales
de Barcelona.
Durante la Exposición Universal de 1888. Jaime Soler
instala un kiosco de bebidas Gambrinus
en el paseo de la Exposición.
Dibujo y crónica del kiosco en La Vanguardia de 31 de mayo de 1888.
En 1891, Josep Ribas, cocinero
y de algún modo relacionado con el Gambrinus de la Rambla Santa Mónica –quizá a
través de Giró, del que sabemos que en 1893 era dueño del Gambrinus de la
Rambla Santa Mónica y probablemente suegro de Josep Ribas- se hace cargo del
restaurante del Hotel Gran Continental en la esquina de Plaza Cataluña con la
Rambla, en el lugar que ahora ocupa un establecimiento de la empresa El Corte
Inglés. El restaurante se anuncia como
única sucursal del Gambrinus.
Inauguración del Continental. La Vanguardia. 25 de diciembre de 1891.
En la calle Aviño
aparece en 1894 el “Petit Gambrinus”, especialidad en cerveza muniquesa y
helados. Lo rastreo en anuncios de
prensa hasta agosto de 1895.
El Diluvio. 30 de junio de 1894.
Ya en 1908 aparece el Gambrinus de Portal de Santa Madrona con el nombre de Antigua (o Antic) de
Gambrinus.
Durante la primera
década del siglo XX, el único local que conservará el nombre de Gambrinus es el
Antic Gambrinus del Portal de Santa Madrona.
No sé en qué momento abre las puertas el Gambrinus de la Rambla de
las Flores, en el número 5 de la numeración del paseo que perduró hasta el
cambio municipal de 1955. Al parecer, propiedad de un alemán, ya funcionaba cuando Alemania invade Francia en 1914 y en el local se celebraban los triunfos
del ejército tedesco. Una crónica de Juan Cabané y Esteban Vilaró en la revista Destino, describe el local y su dueño del
siguiente modo:
Sabemos por una reunión
de la Junta Directiva de la Sociedad de Atracción de Forasteros en marzo de
1928, por la que se incorpora a la junta el dueño de los establecimientos
Gambrinus, que el tal propietario se llamaba Gustav Ziller. ¿se trata del aleman machucho, lento y ceremonioso
de la crónica de Destino? A saber. ¿y el
plural de “establecimientos Gambrinus” hace referencia a que Ziller además de
dueño, en el supuesto de que lo fuese, del local de la Rambla San José era a la
vez dueño del Antic Gambrinus, o es que en los años veinte se abrieron más
locales Gambrinus? Preguntas para las que de nuevo no tengo respuesta.
Gambrinus de la Rambla San José. Josep Mª Sagarra. 1931, ANC
A partir de los años
treinta, el Antic Gambrinus se anuncia como Dancing Gambrinus en lo que supongo
una nueva orientación del negocio dedicado ya a ampliar su oferta al negocio de
la carne mercenaria. Ya solo aparece
este Dancing Gambrinus en las crónicas de sucesos. En una noticia propia de una
película de detectives de serie B, se
encuentra en las proximidades del ¿campo de Garcen? un joven muerto con una pistola al lado y en
uno de los bolsillos, una bolsa de azucarillo con la inscripción Dancing Gambrinus.
Llega la guerra y el
Dancing Gambrinus continua sus actividades. Lo sabemos porque el 28 de abril de
1937 entra en el garito el miliciano José Farah Clara de la columna
internacional con una borrachera considerable y portando un arma larga.
Intentado que fue retirarle el arma y molestándose por ello el miliciano, no encontró otro modo de expresar su
desagrado por el trato que recibía que lanzar una granada que al explotar hirió
a varios parroquianos. O iba muy en pedo
el miliciano o su natural era de una mala leche considerable.
Tras el incidente con
Farah, el silencio. No volvemos a saber nada de ninguno de los Gambrinus hasta
que en los años cincuenta o sesenta se abre el Gambrinus de la calle Guardia
que se hizo famoso en Barcelona por volver a la tradición de los espectáculos de
transformismo que hasta la llegada de la dictadura tuvieron su lugar, y más de uno, en el barrio chino. Como nuestras entradas tienen como limite
temporal la postguerra, nos paramos aquí y solo mencionamos para execrarlo el
escamarlan horrísono que es todo lo que queda del Gambrinus del Moll de la Fusta.
Nunca te acostarás,sin saber algo mas.
ResponderEliminarNuestro Barrio,fué Pueblo Nuevo,una fabrica de ..fabricas.Yo nací en san Paciano,vivi en Arco del Teatro,conocí Arc del Ciré,y seguí en e san pau 94,puerta con el Cuartel,y en carretas.casi nada!Un abrazo por tu historias,son Impresionantes,
Muchas gracias, Fermin. Un abrazo.
Eliminarara nomes en queda un gran solar al c. en Guardia, tota aquella illa de cases esta practicament enderrocada.
ResponderEliminarCierto. En ese camino hacia la nada del barrio chino
EliminarLas fotos, magníficas. No las había encontrado... Gracias!
ResponderEliminarHola, el Giró que es refereix i que va regentar un dels Gambrinus era el meu rebesavi Pere Pau Giró i Blanch, i si, era el sogre del gran cuiner de Barcelona el Josep Ribas i Pich el del continental. Va ser el reves, Josep Ribas va cedir el Gambrinus al Pere Pau (que com va escriure Regàs, va ser un dels grans peixaters de Barcelona que proveïa a totes les fondes, hotels i restaurants)sé poca cosa d'aquest episodi familiar però si vol rebre el que sé es pot posar en contacte amb mi, mikako48@hotmail.com
ResponderEliminarEnhorabuena, una historia muy interesante.
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